La mermelada de fresa es mi favorita y desde que aprendí a hacerla yo misma, de esto hace ya un año, no he dejado de probar otros sabores con otras frutas y, como no podía ser de otra manera, empezar a investigar un poco por mi cuenta. 

Las fresas con naranja es un postre que me encanta, asique se me ocurrió que una mermelada con este sabor tenía que estar riquísima, y ya puestos a experimentar,  por qué no darle un puntito con  esencia de azahar. Creo que no le podía ir mejor, el aroma de la flor del naranjo creo que es perfecta y complementa todo el sabor de esta mermelada. Tengo el botecito que compré para preparar el Roscón de Reyes y la verdad que no le he dado ningún otro uso, asi que ahí lo tengo muerto de risa esperando receta para ser usado.

* He puesto solo el zumo de la naranja, quizás la próxima vez añada la piel rallada también (sin nada de blanco) para potenciar aún más el sabor de la naranja.

Lavamos bien las fresas, les quitamos el rabito y partimos en cuartos en un bol grande. Añadimos el azúcar y  la esencia de azahar, removemos con un cucharón y dejamos reposar en la nevera mínimo 2 horas para que las fresas suelten todo su jugo y se forme un almíbar.

Volcamos en el vaso de la thermomix y añadimos el zumo de la naranja y el del medio limón. 

Trituramos unos segundos a Vel. 6 si nos gusta encontrarla sin trocitos.

Programamos 25 minutos - Vel. 1 - Temp. 100º

Después ponemos 10 minutos - Vel. 1 - Temp. Varoma (para que espese).

Con unos ingredientes que normalmente solemos tener siempre en casa podemos preparar este suculento plato. Eso fue lo que me lanzó a prepararlo sin pensarmelo dos veces, y aunque parezca laboriosa la receta no lo es en absoluto, es cuestion de organizarse nada más, ya que muchos tiempos coinciden y mientras se cocina una cosa se puede estar haciendo otra. 

Desde que se lo ví a mi queridísima amiga Pandora del blog La Cocina de Pandora he estado esperando el momento para hacerlo. Esta chica tiene unas recetas de escándalo, además está estudiando para cocinera asique  no os digo más, solo con eso os podéis hacer una idea de las delicias que prepara. Aquí os dejo mis cantidades y preparación, para ver su receta podéis pichar aquí.

INGREDIENTES (2 personas)

Con una mandolina cortamos las patatas muy finitas. Si no tenemos este aparatito con un cuchillo y un poquito de paciencia intentaremos hacerlas lo más finitas posibles. 

En una fuente apta para horno (yo un molde de cake de 20x7cm) ponemos un poquito de aceite, cubrimos con una capa de patatas, ponemos sal y alguna especia (yo pimienta negra y orégano). Echamos un chorrito de nata líquida que extenderemos con el dorso de una cuchara para que no sea muy espesa y a continuación otra capa de patatas, sal, especias, nata, etc... hasta acabar terminando con nata, un poquito de pan rallado y queso, y lo metemos al horno a 180º. (Lo he tenido en total unos 25 minutos mientras he ido preparando el resto de la receta).

En una sarten con un poquito de aceite pochamos la cebolla muy picadita. Cuando empiece a estar transparente añadimos el calabacín a taquitos y por último los champiñones laminados. 

Una vez todo hecho añadimos un chorrito de leche para ligarlo. Rectificamos de sal y apartamos. 

Esto será parte del relleno y la salsa.

Cortamos los lomos de abadejo en dos mitades iguales para poder hacer dos capas y el relleno en medio. Pandora comenta que se puede hacer con otros tipos de pescado como meruza, bacalao, salmón... obviamente tendrá que ser un pescado de carne firme para que no se nos deshaga durante el montaje.

En una fuente apta para horno, de pyrex por ejemplo ponemos un poquito de aceite y extendemos bien para que no se pegue nada, ponemos la mitad de los lomos de pescado, un par de cucharadas de relleno a cada trozo, y cubrimos con las mitades restantes. Echamos un poquito de aceite por encima y una pizca de sal. LLevamos al horno donde todavía tendremos las patatas y dejamos 10 minutos más o menos, ya que el pescado se hace en poco tiempo. Al finalizar el cual sacamos todo.

El relleno que nos ha sobrado lo llevamos al fuego y le añadimos un pimiento rojo asado (en su defecto pimientos del piquillo). Damós unas vueltas al calor para que se junten un poco los sabores y apartamos. Volcamos todo en el vaso de la batidora y batimos hasta quedar una crema fina. (Pandora la cuela y vuelve a calentar, yo esto no lo he hecho).

Con un cortapastas cortamos un pedazo del pastel de patata y lo ponemos sobre el plato.

Al lado echamos un cucharón de la salsa. 

Encima de esta ponemos un trozo de pescado relleno y cubrimos con un poquito más de salsa.

La empresa de productos Bicentury ha tenido la amabilidad de enviarme una muestra de sus productos, algunos de ellos ya los conocía pero otros no. La verdad que he quedado encantada con todos ellos, se trata de productos de calidad que nos ayudan a cuidarnos un poquito. A continuación os comento un poco lo que me han parecido, que es lo menos que puedo hacer para agradecer el detalle que han tenido.

Son unas galletas ricas en fibra que contienen extracto de té verde, cuya composición cuenta con polifenoles y cafeína que contribuyen a aumentar la cantidad de calor que generan las células, incrementando así el gasto energético. 

Independientemente de sus propiedades, vienen envueltas en paquetes de 4 galletas lo cual es algo que me encanta, tanto si quieres llevarlas en el bolso como para no tener que abrir un paquete entero y que pierdan así su textura crujiente con el paso de los días. De esta manera se conservan perfectamente. Su textura crujiente es algo que valoro mucho en las galletas, y su sabor que os voy a decir, están buenísimas. 

Había probado las de Yogur - Chocolate y sabía que esta combincación de sabores no me iba a defraudar. También las hay de Yogur - Limón, Integrales con Fructosa, y Manzana - Almendra. Estas serán las próximas en caer.

Estas tostaditas o biscotes tienen un plus de fibra. Lo mejor: No se rompen!! Es algo que odio en este tipo de pan, sobre todo al ser tan finito, la tostadita de abajo lleva bastante peso (tomate, jamón york  y un chorrito de aceite) como podéis obsevar y a cada bocado se mantenía intacta, no se desmoronaba. De sabor os puedo decir que a mí me han gustado, pero te tiene que gustar el sabor de la fibra.

 

Al igual que las anteriores son bajas en grasa y ricas en fibra aunque no tanto, pero su principal caracterísitica es, como su nombre indica que son "Sin Gluten", algo que me parece fantástico para el mundo de las intolerancias. Afortunadamente no tengo la necesidad  de fijarme en este tipo de productos pero están tan buenos que es imposible resistirse. 

Si el sabor de la fibra no os gusta creo que esta sería la opción acertada. Tampoco se rompen al morderlas, la tostadita que me preparé llevaba queso de untar a las finas hierbas, salmón ahumado y tomate con un poquito de orégano.

Aunque en su página Nackea hay un montón de ideas para preparar unos estupendos montaditos y demás recetas, así solos están también muy buenos. Son una buena opción para picar entre horas y echarte algo a la boca. Os dejo la idea que se me ocurrió: unos pimientos morrones asados y atún en aceite. Riquísimo.

Me recuerdan al sabor de las palomitas, a estas les puse un poco de nutella, imaginaos como estaban de ricas. Creo que combinan igual de bien tanto con dulce como con salado.

Por último, los mini nackis de patata son un picoteo ligero y de lo más sano. Son un 94% libre de grasas y te los puedes comer como si de unas patatas fritas de bolsa se tratara. Son un vicio porque están tan buenos que entran solos.

No hay mejor manera de empezar la semana que con un bizcocho.  El que hoy os traigo se trata de un bizcocho de fresas que aprendí hace varios años en el foro de MundoRecetas y que he tuneado un poquito. Le he incorporado además de las fresas, uno de los sabores que en repostería es esencial: la vainilla, con un resultado más que acertado. 

A pesar de llevar poca cantidad de aceite queda un bizcocho muy esponjoso y jugoso. Si os gustan estos sabores, la combinación de ellos es la bomba!

Precalentamos el horno a 220º fuego abajo.

Trituramos las fresas y el azúcar vainillada con la batidora hasta obtener un puré fino y reservamos.

Calentamos la leche unos segundos en el microondas y le añadimos la esencia de vainilla. Dejamos reposar mientras preparamos el bizcocho.

El procedimiento en Thermomix sería el siguiente:

Ponemos la mariposa en las cuchillas, añadimos los huevos y el azúcar y programamos 4 min - Temp.40º - Vel. 2.

Agregamos a lo largo de 1 minuto en Vel.2. el aceite en hilo por el bocal sin parar la máquina y después la laeche infusionada.

Hacemos lo mismo con la harina tamizada con la levadura, la vamos añadiendo sin parar.

Para hacerlo sin Thermomix, yo lo haría de la siguiente manera:

Por un lado batir las claras a punto de nieve.
Por otro, batir las yemas con el azúcar hasta formar una crema esponjosa y blanquecina. Añadirle la leche y el aceite en hilo. A continuación la harina tamizada  con la levadura mezclando con una espátula y por último incorporar las claras a punto de nieve reservadas con movimientos envolventes para no perder el aire que le hemos incorporado.




Mezclamos un tercio aproximadamente de la masa del bizcocho con el licuado de fresas y vamos alternado estas dos mezclas en un molde forrado con papel de hornear.

Primero la masa blanca, encima un chorrito de la mezcla con fresa de forma irregular para que luego nos salgan dibujos en el corte. Y así sucesivamente hasta terminar ambas.

Espolvoreamos con un poquito de azúcar si nos gusta una costra crujiente y llevamos al horno, lo bajamos a 180º y horneamos 45 minutos. A los 20 minutos de horneado le pongo fuego arriba también.

 

Antes de nada, desde aquí  quiero acordarme del pueblo de Lorca. Menudo susto, y menuda tragedia lo que allí ha pasado. Aquí notamos el temblor y me pasmé, en cuestión de dos segundos cuando noté el suelo temblar bajo mis pies me entró un miedo terrible, asique no quiero ni pensar lo que esa pobre gente tuvo que pasar.

El postre que hoy os traigo creo "es apto para tod@s", tanto si estáis haciendo la operación bikini como si no, pues indepèndientemente de eso nos sirve para cuidarnos un poquito, además de sano. He querido buscar algo de este tipo y tras varios intentos  y alguna que otra modificación creo que lo he conseguido, al menos para mi gusto. 

Recuerdo que la marca Vitalinea sacó hace ya varios años una mousse de queso con una base de mermelada que estaba deliciosa, no sé por qué motivo la retiraron del mercado ¡¡si estaba riquísima!! y este tipo de postre es el que andaba buscando.  Espero que os guste tanto como a mí.

Con esta receta participo en el concurso de recetas con frutas de temporada que oragniza MªJosé en su blog Hecho en Casa patrocinado por Tescoma

Ponemos las hojas de gelatina en remojo en agua fría.

Batimos las fresas hasta obtener un puré fino.

Montamos la clara a punto de nieve y reservamos.

En un bol colamos el licuado de fresas para eliminar las pepitas, añadimos el queso batido y con unas varillas integramos con movimintos envolventes. 

Añadimos las hojas de gelatina escurridas y disueltas en la leche caliente. 

Por último incorporamos la clara montada poco a poco con las varillas para que no pierda aire y quede la textura tipo mousse.

Vertemos la preparación en vasitos individuales, a los que previamente podemos poner una cucharada de mermelada de fresa. En unas 3-4 horas estará listo para consumir y disfrutar.

Este pan lo preparé al poco tiempo de recibir el lote de harinas que tan amablemente me envió HARIMSA, y de esto hace ya bastante tiempo. La cuestión es que el otro día me apetecían unas tostaditas y me acordé que con este pan salieron buenísimas, entonces caí en la cuenta que no lo había publicado todavía!!

Este es el preparado de harina que usé.

Desde aquí os lo recomiendo, se hace en un momento y no es necesario tener panificadora. Podemos hacer panecillos o un pan grande como en mi caso. Lo corté en rebanadas y al congelador, me las sacaba al momento de consumirlas pues en la tostadora se descongelan perfectamente y están igual que recién hechas.

PREPARACION:

(en el paquete vienen las instrucciones para su elaboración manual, con panificadora y con thermomix que es la que he usado)

Calentamos 300 ml. de agua 2 minutos, temp. 40º, vel. 2. 

Vertemos la mitad de la harina y la levadura y mezclamos 8 seg, a vel.6.

Añadimos el resto de la harina y amasamos durante 3 minutos a velocidad espiga.

Dejamos levar dentro de la thermomix una hora aprox. (hasta que doble de volumen)

Sacamos la masa del vaso y damos forma en una superficie enharinada, bien en forma de panecillos individuales o en forma de rulo para un molde de cake.

Enharinamos bien el molde, introducimos la masa y cubrimos con un paño húmedo y dejamos levar otra hora más o menos.

Precalentamos el horno a 220º con un cuenco lleno de agua en la base del horno.

Quitamos el paño al pan y lo pulverizamos con agua. Metemos en el horno, bajamos la temperatura a 200º y cocemos unos 45-50 min.

Sacamos del horno y al cabo de unos 10 min. desmoldamos con cuidado y dejamos enfriar pr completo sobre una rejilla. 

 En tostaditas con un poquito de mermelada de fresa que es mi preferida están de vicio.

Siempre empezamos la semana con un bizcocho en casa, pero esta vez no tenía harina, "no problem", así hago el bizcocho de galletas y chocolate que tengo en pendientes taaaaanto tiempo, "Horror!!!, tampoco tengo chocolate fondant para los trocitos!" entonces había que innovar, qué peligro... jeje, pero ha salido bien el invento por eso quería compartirlo con vosotr@s, en una palabra, de-li-cio-so.

Lo hice en la thermomix que como bien sabéis es más rápido, pero sino, el procedimiento normal para preparar bizcochos, auqnue en este caso simplemente lo que he hecho ha sido batir todo junto y listo, nada montar claras ni esponjar yemas, y ya veis lo altito que ha subido.

Echamos en el vaso el paquete de galletas y pulverizamos varios segundos en Vel .5-7-9.

A continuación añadimos el resto de ingredientes y mezclamos todo junto unos segundos en Vel. 6 hasta que se vea todo integrado. 

Volcamos en un molde engrasado con mantequilla (el mío de 18 cm. pido disculpas por haber puesto anteriormente de 22 cm) y llevamos al horno a 180º precalentado unos 45 minutos.

NOTA: Lo del horno, en cada casa es un mundo asique vosotr@s mejor que nadie sabeis como controlar la temperatura y el tiempo. Yo lo he hecho de la siguiente manera: 

- Precaliento a 200º fuego abajo mientras lo preparo. 

- Cuando meto el bizcocho (a media altura más o menos) lo bajo a 180º. 

- Al cabo de unos 20 minutos cuando ya ha empezado a subir, entonces pongo fuego arriba también y mantengo los dos hasta completar los 45 minutos.

Cuando Ana propuso organizar su concurso ¿Qué desayunamos hoy? sabía que iba a participar. Coincido con ella en que el desayuno es mi comida preferida del día, y desayunos favoritos tengo infinitos al cubo jejeje.. pero lo mejor de esta comida para disfrutarla es tomársela con relax, prepararla sin prisas y degustarla como dios manda, pues en realidad es cuando podemos disfrutar verdaderamente de las delicias que preparamos.. o no?

Las tostadas con mantequilla son un clásico que en mi casa de vez en cuando no faltan (siii ya sé que la mantequilla no es buena, pero está taaan rica que de vez en cuando no pasa nada), asique la propuesta es una variante de las mismas, en realidad se trata de "tostadas a la plancha"  y son una verdadera delicia. Estos franceses sí que saben...

Con este desayuno participo en el concurso ¿Qué desayunamos hoy? que organiza Ana del blog ¿Cuantas horas tiene el día? Tenéis hasta el 8 de Mayo para participar.

Ponemos en un bol la leche, el huevo, el azúcar y la canela y lo batimos todo juntos unos segundos hasta conseguir una mezcla homogenea.

Volcamos en un pato hondo y empapamos las rebanadas de pan por ambos lados, no dejar demasiado tiempo ya que se romperían, tan solo "empapar". 

Espolvoreamos por una cara con azúcar moreno y la volcamos en una sartén a fuego medio engrasada con un poquito de mantequilla. 

Mientras se hace espolvoreamos también la cara superior con azúcar moreno para que al dar la vuelta se tueste, quedano así una cubierta crujiente de caramelo. 

Dejaremos hacerse unos 3-4 minutos por cada lado vigilando de que no se quemen, por eso siempre será mejor tener un fuego bajo.

Fuente: Receta sacada del blog Technicolor Kitchen

INGREDIENTES (2p)

Minetras cocemos la pasta en una olla con abundante agua hirviendo, cocinamos el brócoli. Separamos los ramitos y enjuagamos bajo el chorro de agua fría. Yo suelo cocinarlo de una de estas dos maneras, al vapor o en microondas. En ambos casos con 5-6 minutos son suficientes.

Para hacerlo en microondas ponemos los ramilletes en una fuente de pyrex y tapamos con su tapa que encaje sin añadir nada más, se hará en su propio jugo.

Al vapor, ponemos un cazo con un poco de agua y el cestillo para cocinar al vapor. Cuando comience a hervir, ponemos el brócoli y tapamos.

En una sartén con una cucharada de aceite rehogamos el bacon a fuego suave. Entretanto el brócoli se habrá hecho, y lo volcamos a la sartén con el bacon para que se impregne de sabor, removemos unos instantes al fuego y apartamos.

Echamos esta mezcla y la pasta escurrida en una fuente apta para hornear. Mezclamos, cubrimos con la bechamel y espolvoreamos con queso rallado. Gratinamos 5-10 minutos con el horno precalentado a 210º o hasta que se vea dorado.